No importa si manejás hace muchos años o recién estás empezando: manejar de noche representa un desafío. La visibilidad se reduce, hay más accidentes y, en definitiva, es más peligroso. ¿Cómo podemos hacer para que manejar de noche sea una experiencia más segura y llevadera?
Conducir de noche representa un peligro porque disminuye la visión, percibimos los objetos y otros autos con demora y tardamos en reaccionar, y estamos más cansados. Por eso es útil que repases algunos ítems clave:
- Ajustá tus luces. Es muy importante que alumbren la zona justa. La suciedad y el desgaste también son factores importantes: si están amarillentas o rayadas, llevalas a tu taller de confianza para que las limpien y las renueven si hace falta.
- El cansancio es otro de los factores muy importantes a tener en cuenta. Por eso, si tenés planeado hacer un viaje de noche, descansá antes. También se recomienda no comer pesado antes de iniciar el viaje. Tené alguna bebida a mano para mantener la hidratación, fijate que la temperatura del auto esté fresca y no te abrigues mucho.
- Bajá la intensidad de las luces del tablero. Pueden ser una distracción innecesaria para tus ojos, que necesitan ajustarse a la oscuridad del ambiente externo.
- ¿Usás anteojos? Chequeá que sean los correctos. Lo mejor es que tengan lentes antirreflejo, que ayudan a que pase más luz y puedas ver mejor.
- No mires directo a las luces que vienen de frente. Pueden desconcentrarte y cegarte. Si un auto detrás tuyo tiene las luces largas encendidas y están mal ajustadas, mové el espejo retrovisor para que refleje la luz hacia atrás. Así el conductor se va a dar cuenta y además evitás que el reflejo te impida ver bien.
- Limpiá bien el parabrisas antes de salir. Podés hacerlo con papel de diario: esto va a evitar que se genere un resplandor. Tratá de no tocar los vidrios de las ventanas y el parabrisas por dentro para no mancharlos con los dedos. Siempre es bueno tener un paño de microfibra a mano en el auto.
- Usá las luces antiniebla. Son útiles incluso cuando no hay niebla porque tienen un alcance mayor que las luces cortas. Acordate que estas luces, como están posicionadas más abajo, hacen sombras más grandes en objetos pequeños, baches o irregularidades.
- Limpiá y ajustá bien los espejos. Al igual que con el parabrisas, pueden reflejar y distorsionar luces externas que generan distracciones para la vista. Una buena manera de hacerlo es apuntarlos ligeramente hacia abajo.
- La salud y el estado de tus ojos es muy importante. Además de hacerte chequeos de rutina, para ayudar a que no se cansen mientras estás manejando, no los enfoques en una sola área: tratá de mirar a todo tu campo visual.
- Un consejo de seguridad que aplica para cualquier momento, pero es todavía más importante de noche, es evitar las distracciones. No mires el celular y mantené las manos libres para ocuparte 100% de conducir.
La verdad que es muy peligroso yo hice un viaje de 18 hs y los camiones que vienen de frente te encandila acá en la Argentina hacen las rutas ida y vuelta juntas tendrían que estar separadas